jueves, 30 de agosto de 2007

RBK Premier Trinity KFS

Ya tengo nuevas zapas. El otro día aprovechando que pasaba por Decathlon estuve mirando algunos modelos de zapatillas que tenía seleccionados. Las Saucony no las vi pero encontré las Asics Gel Kayano y las Reebok Premier Trinity KFS. Me probé los dos modelos sin importarme el precio (eran las más caras de todas). Al principio pensaba que con todo lo que había oído de Asics iba ser un hombre nuevo dentro de esas zapatillas y siento decir que no noté nada especial. De hecho me resultaban un poco estrechas y no me sentía realmente cómodo. Es probable que su amortiguación sea la mejor que existe pero mis pies intentaban acoplarse sin éxito. Todo lo contrario que con las Reebok. Nada más calzármelas supe que eran las elegidas. Las sensaciones eran geniales, el pie sujeto, la planta completamente apoyada y notaba como la plantilla cogía la forma del pie (impresionante). Después de tantos años la elección estaba hecha, el precio marcaba 120€, que no es ninguna tontería, pero me daba igual. Fui a la caja y... ¡oh, sorpresa!, ¡¡estaban rebajadas a 89,90€!!.

Creo que he elegido bien porque fue considerada por la revista Runners como la mejor zapatilla del 2006 (aunque aquí llegue en el 2007). Además esa misma noche salí a probarlas (no pude esperar) y no recordaba lo que era notar la amortiguación en las plantas de los pies, era como si me hubiese quitado una mochila llena de piedras de la espalda. De hecho hice mi recorrido de entrenamiento ¡5 minutos más rápido que de costumbre!, y lo mejor es que no acabé muy cansado ni con las rodillas temblando.

El comienzo ha sido bueno, habrá que seguir probando...




viernes, 17 de agosto de 2007

Va siendo hora de renovarse

Y no es broma. Por mucho que me pese creo que tengo que cambiar de zapatillas. Las pobres me han aguantado durante mucho tiempo y me temo que ha llegado la hora de jubilarlas. Cuando digo mucho tiempo lo digo en serio, por lo menos cuatro años recorriendo conmigo estos mundos de Dios. Cuando se lo comento a mi hermano Oscar siempre me echa la bronca, que si estoy loco, que cómo es posible que siga con esas zapas, que me voy a joder las articulaciones... Al final voy a tener que darle la razón.

El otro día salí a correr sin hora de vuelta, es decir, cojo mi ipod, el móvil y la botella de agua y salgo a explorar sin tener muy claro hasta dónde voy a llegar. Es una experiencia que recomiendo a todo el mundo porque uno se sorprende a sí mismo y redescubre sus propios límites. Eran las seis de la tarde y hacía un poquito de calor así que el desgaste era considerable a las dos horas. Me dolían las piernas y sobre todo los dedos y las plantas de los pies. Lo peor fue mirar hacia abajo y ver que los pies se torcían hacia dentro más de lo normal (soy un poco pronador).

Mis zapatillas se han ido desgastando con el paso del tiempo y ya no tienen nada de estabilidad y cada vez lo noto más en mis rodillas y tobillos. Cuando salía veinte minutos no había problema, pero cuando estás dos horas y media soportando mi peso, que no es poco, me estoy jugando una lesión seria, y claro, no voy a dejar de hacer lo que me gusta, así que voy a invertir un poquito en material.

Llevo un tiempo investigando y tengo un par de modelos que se ajustan bastante a mis características como corredor y a mi bolsillo. Uno de ellos es de la marca Saucony, las Pro Grid Omin 6

Para corredores pronadores que también necesiten amortiguar el golpe con el suelo de manera eficiente y quizá en grado máximo. Son además muy duraderas y estables. Peso: 354gr. Precio: 120€.









El otro es de Reebok, que es la marca que uso ahora. Las Premier Trinity KFS

Pertenece a la colección Premier, lo que ya indica que es ideal para corredores exigentes. Este modelo para pronadores severos que tengan un peso medio o alto con máxima amortiguación. Peso: 323gr. Precio 110€.

Estas últimas están recomendadas por el personal de Bikila pero no estoy muy seguro de seguir con la misma marca. Bueno, tengo hasta septiembre para decidirme porque no tienen tallas hasta que reciban de nuevo la mercancía.




Hasta entonces, no queda otra que forzar un poquito las rodillas.

sábado, 4 de agosto de 2007

Born to run


Ya está, ya pasó todo... o sólo acaba de empezar. El pasado día 25 de julio (tal y como predije, si esto sigue así pondré un consultorio) a las 14:40 nació mi hijo Hugo. Pesó 3.340gr. y midió 52cm. Qué puedo decir que no se haya dicho ya. La experiencia es impresionante, ver cómo le sale la cabecita y poder disfrutar de eso con su madre es lo mejor que me ha pasado. Tengo que reconocer que desde ese día valoro más la fortaleza de las mujeres para poder hacer frente a esos momentos. Mi mujer me dejó sin palabras, nunca la había visto tan guapa ni tan serena.

He llorado, me he reído y he pasado miedo, todos esos sentimientos me han alimentado durante estos días, aunque he perdido un par de kilos. Tengo un hijo. Da un poco de vértigo, qué digo, da mucho vértigo pensar que esta cosita depende de uno, ¡pero si no puedo cuidar ni de mí mismo!. Sin embargo, no sé muy bien cómo explicarlo, pero no le tengo miedo a nada, tengo ganas de disfrutar cada momento de su vida y me siento capaz de enfrentarme a todo.

El otro día salí a correr tras una semana casi sin dormir y con el cuerpo un poco cambiado, pensaba que estaría en casa a los veinte minutos. A la hora y cuarto llegué a casa y me encontraba genial, con fuerzas para salir de nuevo.

Como dice la canción de Springsteen, tenemos que salir mientras somos jovenes, porque hemos nacido para correr. Ya tengo planes para entrenar con el carrito por las calles de Madrid y por las piernas y los pies que tiene Hugo me temo que va a ser una máquina del running.



Mi vida acaba de dar un giro de 180º y me alegro.