Pues estos son mis pies a día de hoy. Están hechos un asco. Las uñas de los índices me las tuve que quitar el otro día porque estaban creciendo mal y el dedo gordo de mi pie izquierdo está cogiendo un color púrpura que no me gusta nada. Y es que no me da tiempo a cogerles cariño, cuando empiezan a ponerse bien y a crecer de forma normal pasa algo que lo tuerce todo. Ese mismo dedo gordo que ahora cambia de color ha perdido su uña unas cuatro veces, si no es por el deporte es porque me engancho con un hierro (mejor no contar detalles), pero no me duran más de tres meses.
Últimamente estoy haciendo recorridos más largos y más duros, sin tener en cuenta la velocidad, corriendo a un ritmo en el que me encuentro cómodo. Me pierdo por los caminos, busco rutas nuevas, exploro otros recorridos, me lo paso bomba. Pero claro, a veces te llevas sorpresas desagradables, como por ejemplo perderse. Ya me ha pasado más de una vez y son los días que más corro y que menos me cuesta, supongo que por la descarga de adrenalina ya que los sitios por los que me pierdo no son los más recomendables para pasear. Sin embargo se conocen lugares muy curiosos, zonas industriales, urbanizaciones en obras, túneles extraños (cuidado con los murciélagos que me han dado algún susto), y gente que te mira como diciendo, pero este... ¿qué está haciendo?.
Por eso raro es el día en el que no corra al menos una hora y media. El otro día salí de excursión por el anillo verde y me gustó mucho, el problema es que hay algunas zonas que todavía están en obras y no ves una fuente en muchos kilómetros (jodida agua...). Pasaban las zonas de descanso de ciclistas y nada, ni una gota, todas las fuentes por poner. Al final tuve que pararme más seco que una pasa a las dos horas de empezar. No es que hiciese mucho calor (salí de casa a las cinco de la tarde) pero se nota que pierdes mucho líquido sin darte cuenta y cuando entra la sed ya es tarde. No me importa la distancia que corrí ni el tiempo por kilómetro, lo único que sé es que lo disfruté como un niño, así que habrá que repetir.
Eso sí, esta vez me llevo dos botellas.